Sarai Gascón
Empezó a nadar porque le encantaba el agua. Nunca hubiera imaginado tener el nivel que ha alcanzado para competir, hasta que sus padres se apuntaron a un cursillo de natación y ella los acompañó. El monitor de sus padres, la vió nadar, se sorprendió, y le propuso entrar en el equipo de competición del club. Desde entonces su palmarés no ha parado de crecer.
